Naranjas

La naranja: remedio contra el frío invierno.

Este invierno está siendo cada día más virulento y desde hace tiempo se oye en las noticias y se ve en las consultas de nuestros ambulatorios, que estamos pasando por una epidemia de gripe y de otros tantos derivados catarrales.

Hemos destacado y comentado en muchas ocasiones que la naranja puede convertirse en un aliado vital contra muchos problemas de salud que podamos sufrir, y aunque los problemas respiratorios nos parezcan secundarios, en muchas ocasiones los síntomas catarrales o gripales terminan por postrarnos en una cama sin permitirnos realizar una vida normal y cumplir con nuestras obligaciones diarias, haciéndonos sentir francamente mal.

Uno de los remedios más antiguos y más efectivos para combatir estos grandes fríos que nos pueden provocar todo tipo de infecciones en vías altas como son constipados, gripes, faringitis, anginas, etc., es un zumo de naranja natural caliente (no hirviendo) con un par de cucharadas de miel.

Aunque ya os hemos hablado concretamente sobre este “milagroso brebaje anticatarral” hoy queremos volver a destacarlo puesto que este típico “remedio de la abuela” sirve tanto para evitar caer enfermos como para aliviar los síntomas de dichas enfermedades en todas las épocas del año.

La combinación de la vitamina C de la naranja con las propiedades expectorantes y antitusivas de la miel (entre otras muchas), es excelente para suavizar la garganta y abrir las vías respiratorias, resultando adecuado también para las personas que sufren de alergias primaverales o invernales.

Además de todas la bondades que tiene este jarabe casero contra la gripe y los resfriados, podemos añadir que pueden tomarlo toda la familia desde los más pequeños, puesto que es totalmente inofensivo y 100% natural. Aunque hay que tener en cuenta que los niños menores de tres años no deben consumir miel bajo ningún concepto, debido al riesgo al que se les expone de poder contraer botulismo (consulte con su pediatra). Así mismo deben tener especial cuidado las personas que sufran de diabetes y quien tenga sobrepeso.

Tanto la naranja como la miel nos ayudarán a librarnos de los molestos estornudos, la fiebre, los dolores articulares y musculares y a recuperar rápidamente nuestra energía vital.

Podremos encontrar muchas variantes a este remedio básico, como es agregarle a la mezcla limón, jengibre, eucalipto, papaya o canela entre otros ingredientes naturales que nos aportarán beneficios adicionales que nunca están de más para ayudarnos a combatir los efectos del frío invierno.